Para alcanzar ser un buen líder es necesario que trabajes en tus habilidades de liderazgo. Debes estar consciente que los grandes líderes no nacen, estos se van formando a lo largo del tiempo y las circunstancias. Por supuesto, el carisma, la personalidad afable y poder de convencimiento es necesario.
Tal vez, hayas conocido una persona que sin mucho esfuerzo es escuchado, seguido y respetado por las personas que le rodean. Ese es alguien con carisma natural y seguramente espíritu de líder, se podría decir que puede conducir a un grupo el alcance de una meta.
Un buen líder es aquel que sabe poner en marcha a un grupo y logra influir en ellos hasta alcanzar metas comunes e individuales. Posee cualidades lógicas y prácticas para proyectarse y avanzar delante de otras personas, guiándolas y aupándolas para que no desmayen en un propósito establecido.
Comenzar en la carrera del liderazgo
La carrera de un líder no se inicia de la noche a la mañana, se va desarrollando con la práctica. Para ello deberás tener suficiente paciencia. No solo con el grupo sino también contigo mismo. Debes consolidar un equipo de trabajo relacionado, cónsono y con ánimo de salir adelante.
Deberás rodearte primero de personas que busquen un fin común y estén dispuestos a trabajar a un ritmo que los lleve a consolidar sus intereses. Estar atento a todos los aspectos que se vinculen a las metas trazadas y estudiar fortalezas y debilidades. Ir avanzando un paso a la vez, sin atropellar las acciones, ni a los miembros del equipo.
¿Cómo ser un líder con autoridad?
Debes tener claro que un líder guía a un grupo de personas para el logro satisfactorio de un objetivo común y en diversos niveles. Por tanto, debe estar consciente de las estrategias a seguir para consolidar los planes trazados. Por supuesto debe ejercerla autoridad para que todo se cumpla cabalmente, sin rebasar los límites y la tolerancia.
Sin embargo, aclarando que la autoridad difiere del autoritarismo. La misma debe ir a la par de la justicia, el respeto y valoración al grupo que te sigue como líder. La humildad, la educación y el saber escuchar, pueden ser los recursos más relevantes para llevar el liderazgo por un buen sendero.
Diferencias de un jefe y un líder
Algunos piensan que por ser jefes de un departamento o unidad en su lugar de trabajo son líderes del grupo. Por lo que piensan que sus razonamientos deben ser seguidos al pie de la letra sin opinar. Allí es en donde se puede apreciar significativamente la diferencia entre un jefe y un líder.
Un jefe planifica en función de sus intereses, ordena la ejecución de acciones para el alcanzar sus metas, el equipo no es lo primero para él. Un líder escucha a su grupo de trabajo, crea su estructura complementando las habilidades entre sí, identificando sus fortalezas y reconociendo sus debilidades.
Un buen líder valora su equipo de trabajo, cuida que tengan los recursos necesarios para salir adelante, los escucha y apoya ante las incertidumbres. Supera las equivocaciones, personales o grupales y busca aprender de cada circunstancia, creciendo como persona y profesional. Un jefe, se podría decir que ordena y quiere resultados a pesar de las circunstancias.
Recomendaciones para ser un buen líder
Son muchos los aspectos que debe poseer un buen líder, sobre todo ser buena persona y humilde para llegar a ser ejemplo de quienes le rodean. Es alguien que disfruta del proceso de lo que hace y está consciente de que todos los beneficios son compartidos.
Debes tener la capacidad de ponerte a frente de un grupo e influir positivamente en ellos. Para alcanzar objetivos comunes de manera armoniosa y permitiendo a cada miembro participe. Reconociendo su aporte, valorando los esfuerzos individuales y colectivos.
Comunica de la forma adecuada
Un buen líder se comunica de manera clara, sin ambigüedades, expresa al equipo lo que se necesita lograr. Sabe transmitir indicaciones y sus motivaciones al tomar algunas decisiones en beneficio del grupo. Es una persona empática, entiende las particularidades de cada individuo y sabe sacar el máximo rendimiento de cada integrante.
El ejemplo es la mejor guía
Un buen líder es una persona consistente, muestra siempre congruencia con lo que profesa. Entre lo que dice, hace y piensa mantiene la coherencia y firmeza, por lo que inspira confianza a su equipo. Mostrando una actitud integra y cónsona con los principios establecidos en tu equipo de trabajo, le estas brindando el mejor ejemplo para actuar.
Reconoce los logros de los demás
El líder reconoce los talentos y fortalezas de su equipo, registra los logros individuales y grupales, motivando y proyectando la labor de cada uno. Felicita y resalta cada vez que alcanzan un reto.
Potencia las capacidades de tus empleados
Un buen líder no descuida a su equipo, tiene presente que deben nutrirse física y laboralmente. Permite que cada uno vaya desarrollándose en sus áreas particulares, para alcanzar el máximo potencial de cada integrante de su fuerza laboral. Les crea un clima agradable en donde puedan ir expandiendo sus aspiraciones.
Delega funciones
El líder es una persona observadora y que confía en su equipo de trabajo. Determina con facilidad las potencialidades de cada integrante y delega funciones para que otros también se vayan desarrollando en el área de trabajo.
Crea equipos de trabajo en donde se distribuyen las responsabilidades para el alcance de los objetivos. Hace que todos sean participe e integradores de los logros de las metas.
Una persona con capacidad de liderazgo es aquella que inspira a su grupo. El equipo lo sigue, sabe el rol que debe cumplir cada miembro para alcanzar los objetivos, el líder no tiene necesidad de estar ordenando continuamente.